El azaque: la palabra coránica para la caridad que enriquece tanto al que da como al que recibe

Hasta donde sabemos, la palabra coránica azaque y el significado que transmite no tienen equivalente en ningún otro idioma. No es sólo una forma de caridad, limosna, impuesto o diezmo. Tampoco es simplemente una expresión de bondad; son todos estos combinados y mucho más. No es simplemente una deducción de un cierto porcentaje de la propiedad de uno, sino un enriquecimiento abundante y una inversión espiritual. No es simplemente una contribución voluntaria a alguien o a alguna causa, ni un impuesto gubernamental que una persona astuta e inteligente pueda salirse con la suya. Más bien, es un deber ordenado por Dios y asumido por los musulmanes en interés de la sociedad en su conjunto. (Obtenga más información sobre el espíritu de caridad en el Islam.)

La palabra coránica azaque no sólo incluye caridad, limosna, diezmo, bondad, impuestos oficiales, contribuciones voluntarias, etc., sino que también se combina con todos estos motivos de mentalidad divina y espirituales y morales. Por eso no puede haber equivalente a la palabra azaque debido a la originalidad suprema del Corán, el Libro Divino de Dios.

El azaque (caridad) es pureza

El significado literal y simple del azaque es pureza. El significado técnico de la palabra designa la cantidad anual en especie o moneda que un musulmán con medios debe distribuir entre los legítimos beneficiarios. Pero el significado religioso y espiritual del azaque es mucho más profundo y más vivo. También lo es su valor humanitario y sociopolítico.

Entendiendo el azaque

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El Dr. Altaf Husain aclara el concepto de Zakat, su propósito y objetivos dentro de la comunidad musulmana.

Los efectos de largo alcance del azaque:

El impuesto islámico que promueve la prosperidad

El azaque purifica la propiedad del pueblo con medios y la libera de las acciones que ya no le pertenecen, las acciones que deben distribuirse entre los beneficiarios debidos. Cuando se paga azaque, un cierto porcentaje de la riqueza debe distribuirse inmediatamente de la manera correcta, porque el propietario ya no tiene posesión moral o legal de ese porcentaje. Si no lo hace, obviamente se queda con algo que no le pertenece. Esto es corrupción y pura usurpación desde todos los puntos de vista, moral y espiritual, legal y comercial. Esto significa que el porcentaje retenido ilegalmente hace que todo sea impuro y esté en peligro. Pero, por otra parte, si los dividendos de los pobres se clasifican y distribuyen entre los beneficiarios correspondientes, las porciones restantes del lote serán puras y decentes. El capital puro y las posesiones decentes son los primeros requisitos de la prosperidad permanente y de las transacciones honestas.

Superar la codicia y la envidia

El azaque no sólo purifica la propiedad del contribuyente sino que también purifica su corazón del egoísmo y la codicia por la riqueza. A cambio, purifica el corazón de quien lo recibe de la envidia y los celos, del odio y la inquietud; y fomenta en su corazón, en cambio, buena voluntad y cálidos deseos para el colaborador. Como resultado, la sociedad en general; se purificará y liberará de la lucha de clases y la sospecha, de los malos sentimientos y la desconfianza, de la corrupción y la desintegración, y de todos esos males.

Un pilar del Islam que beneficia a todos

El azaque mitiga al mínimo los sufrimientos de los miembros necesitados y pobres de la sociedad. Es un consuelo muy reconfortante para las personas menos afortunadas, pero es un fuerte llamado a todos para que se arremanguen y mejoren su suerte. Para el necesitado significa que es por naturaleza una medida de emergencia y que no debe depender completamente de ella, sino que debe hacer algo por sí mismo y por los demás. Para el contribuyente es una cálida invitación a ganar más para poder beneficiarse más. Para todas las partes interesadas, es, directa e indirectamente, un tesoro abierto para la inversión espiritual que compensa abundantemente. (Leer más: El hambre, nuestra responsabilidad y realidad última)

Un pilar del Islam que promueve la paz y el orden

El azaque es una forma saludable de seguridad interna contra la codicia egoísta y la disensión social, contra la intrusión y penetración de ideologías subversivas. Es un instrumento eficaz para cultivar el espíritu de responsabilidad social por parte del contribuyente y el sentimiento de seguridad y pertenencia por parte del receptor.

El camino intermedio del Islam entre el capitalismo y el socialismo

El azaque es una vívida manifestación del espíritu espiritual y humanitario de las interacciones receptivas entre el individuo y la sociedad. Es un buen ejemplo del hecho de que, aunque el Islam no obstaculiza la empresa privada ni condena las posesiones privadas, tampoco tolera el capitalismo egoísta y codicioso. Es una expresión de la filosofía general del Islam que adopta un rumbo moderado y medio pero positivo y eficaz entre el individuo y la sociedad, entre el ciudadano y el Estado, entre el capitalismo y el socialismo, entre el materialismo y la espiritualidad.

Desde: Islam en foco por Hammudah Abdalati (Publicaciones American Trust). Consigue el libro de www.isna.net

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